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Inaceptable. Bruno Pacheco Castillo exigió otorgar el grado de general de brigada a los coroneles Ciro Bocanegra Loayza, paisano del jefe del Estado que labora en Palacio de Gobierno, y Carlos Sánchez Cahuancama, asignado a la primera dama, Lilia Paredes.

 

El secretario general del despacho de la Presidencia de la República, Bruno Pacheco Castillo, fue identificado por los ex comandantes generales del Ejército general de división (r) José Vizcarra Álvarez, y de la Fuerza Aérea, general del aire (r) Jorge Chaparro Pinto, como la persona que a nombre del mandatario Pedro Castillo exigió el ascenso de grado de oficiales de ambas instituciones que no habían calificado durante el proceso de evaluación de los institutos armados.

El general Vizcarra mencionó a La República que entre los recomendados por Pacheco para ascender al grado de general de brigada se encontraban los coroneles EP Ciro Bocanegra Loayza, como informó este diario, y Carlos Sánchez Cahuancama. Bocanegra labora en la Casa Militar de Palacio de Gobierno y es cercano al presidente Castillo, y Sánchez está asignado al servicio de la primera dama, Lilia Paredes Navarro.

El general EP (r) José Vizcarra relató así a La República lo sucedido: “La recomendación a favor de los coroneles Bocanegra y Sánchez me la hizo conocer el edecán del ministro del Defensa (el teniente coronel EP Youri Hurtado Llanos), Walter Ayala, y lo reafirmó el secretario del presidente, Bruno Pacheco”.

Sorprendido por la intervención de Pacheco, el general Vizcarra se reunió con el presidente Castillo. Y le confirmó el requerimiento.

“Le expliqué al presidente Pedro Castillo las razones por las que los coroneles Ciro Bocanegra y Carlos Sánchez Cahuancama no podían ascender porque no tenían los puntajes, ni las atribuciones éticas y morales. Pensé que el presidente había entendido el tema, porque me dio su respaldo para continuar en la Comandancia General del Ejército. Sin embargo, el jueves 4 de noviembre se publicó mi relevo”, indicó Vizcarra.

“Ambos coroneles eran aptos para ser candidatos, pero estaban fuera de la cantidad de vacantes asignadas por no poseer el puntaje ni las condiciones ético-morales para ascender. Eso es lo que se decidió en el proceso de ascensos por el Comité de Asesores y el Comité de Selección, integrado este por los generales de división”, arguyó el ex comandante general del Ejército José Vizcarra.

Entrevistado por este diario, el ex comandante general de la FAP Jorge Chaparro confirmó la investigación de La República que reveló el pedido que le hizo el secretario presidencial Bruno Pacheco para ascender de grado al mayor general FAP Edgar Briceño Camero.

“El secretario de Palacio, Bruno Pacheco, me llamó para recomendar al general Edgar Briceño, diciéndome que lo ascendiera. Yo le escuché y luego le contesté que era imposible, porque Briceño es de la especialidad de Operaciones Especiales, no tiene el mérito y no tiene ninguna competencia para ascender al grado inmediato superior, que es el grado de teniente general de la FAP”, manifestó Chaparro a este diario.

“Era imposible porque la FAP ya había evaluado a los postulantes al grado de teniente general. Le dije a Pacheco que no se podía hacer eso. Incluso le sugerí que, si era un pedido del presidente Pedro Castillo, estaba dispuesto a explicarle. Pero Bruno Pacheco insistió que lo evaluara y me cortó la llamada”, relató el ex comandante general de la FAP Jorge Chaparro.

“El secretario de Palacio, Bruno Pacheco, me llamó para recomendar al general Edgar Briceño, diciéndome que lo ascendiera. Yo le escuché y luego le contesté que era imposible, porque Briceño es de la especialidad de Operaciones Especiales, no tiene el mérito y no tiene ninguna competencia para ascender al grado inmediato superior, que es el grado de teniente general de la FAP”, manifestó Chaparro a este diario.

“Era imposible porque la FAP ya había evaluado a los postulantes al grado de teniente general. Le dije a Pacheco que no se podía hacer eso. Incluso le sugerí que, si era un pedido del presidente Pedro Castillo, estaba dispuesto a explicarle. Pero Bruno Pacheco insistió que lo evaluara y me cortó la llamada”, relató el ex comandante general de la FAP Jorge Chaparro.

Abrumado por las revelaciones de los ex comandantes generales del Ejército y de la FAP, y su implicación en el intento de ascender a oficiales que no estaban calificados, el ministro de Defensa, Walter Ayala, anunció que dará un paso al costado. Pero en realidad lo renunciaron.

‘’Pongo a disposición del presidente de la República y jefe supremo de las FF. AA. (…) (Que) no usen pretextos contra la democracia’’, escribió en su cuenta de Twitter.

Walter Ayala tuvo pleno conocimiento de las intromisiones del secretario de Presidencia de la República, Bruno Pacheco Castillo, para ascender de grado a oficiales del Ejército y la FAP, sin haber sido evaluados y propuestos por sus respectivas instituciones castrenses.

Cuando La República difundió el caso, el ministro Ayala públicamente negó los hechos. Ahora ha dimitido para evitar la censura del Congreso. Su salida, sin embargo, no le permitirá evadir su responsabilidad.