La primera vuelta de las elecciones presidenciales en Chile no sólo dejó un balotaje entre las posturas radicalmente opuestas del derechista José Antonio Kast y del izquierdista Gabriel Boric.
La agitada jornada electoral también dejó varias sorpresas que revelan el cambio político que está viviendo este país sudamericano.
Y es que por primera vez desde al retorno a la democracia, en 1990, la presidencia no se la disputarán los partidos tradicionales de centroizquierda y centroderecha.
El triunfo de Kast, de derecha radical, pareciera interrumpir el giro a la izquierda que se venía dando en Chile desde el estallido social de octubre de 2019, cuando comenzaron las masivas protestas que demandaban profundas reformas al actual sistema económico, político y social chileno.