Primer paso. La primera ministra Mirtha Vásquez visitó ayer Apurímac para reunirse con los ciudadanos de Cotabambas, quienes tenían bloqueado el corredor minero. Llegaron a seis acuerdos, entre ellos el canon y levantar el paro. Los ánimos, por ahora, se calmaron. Aún faltan otras demandas por resolver.
Por el momento, los ánimos se mantienen calmados en la provincia de Cotabambas, Apurímac. Desde la semana pasada este lugar fue uno de los puntos del bloqueo del corredor minero por donde los camiones de la empresa MMG Las Bambas trasladan cobre y otros minerales.
La población había exigido la presencia del presidente Pedro Castillo y su primera ministra, Mirtha Vásquez. Por eso, ayer a las 10.30 a. m., Vásquez, acompañada del ministro de Energía y Minas, Jaime Gálvez, y el viceministro de Hacienda, Gustavo Guerra García, llegaron al centro poblado de Pisaccasa, distrito de Mara, provincia de Cotabambas, en Apurímac, para escuchar las demandas de sus ciudadanos y establecer mesas de diálogo.
Entre las demandas de los cotabambinos está el canon de MMG. Este equivale al 50% del impuesto a la renta y está vinculado a las ganancias de la empresa. Sucede que Las Bambas, hasta la fecha, aún no reporta utilidades.
A la 1 p. m., luego de que los dirigentes fueran trasladando sus demandas, la titular de la PCM tomó la palabra. Y comenzó su exposición refiriéndose al canon minero. Precisó por qué Las Bambas aún no podía hacer ese pago. Sin embargo, después hizo un anuncio que enfrío la protesta parcialmente en Mara.
“Respecto al canon, todavía se discutía cuándo Las Bambas comenzará a pagar el canon. El 2022 se empieza a pagar el canon para esta zona del país. Hemos venido con el viceministro de Hacienda, y lo voy a comprometer. Esto es algo que debemos manejar desde el Ejecutivo. Desde el 2022, hay el compromiso de pagar el canon”, manifestó.
Vásquez, entonces, le cedió la palabra al viceministro Guerra García. Este explicó que para diciembre el Gobierno podrá precisar a cuánto dinero equivale el canon minero que recibirá Cotabambas. “A los gobiernos regionales y municipales se les da el 50%, y el otro 50% se incorpora en el presupuesto. De todas formas habrá un presupuesto de canon”, aseguró.
Los seis acuerdos
Luego la primera ministra y los dirigentes de Mara pasaron a suscribir los seis acuerdos a los que llegaron ella y los cotabambinos.
Precisamente, entre estos puntos de consenso está la entrega de canon minero del proyecto Las Bambas.
El segundo es que para el 2022 el Ministerio de Economía y Finanzas dotará de recursos para mejorar el hospital de Tambobamba. En la sesión del jueves pasado, el Consejo de Ministros había aprobado, además, destinar fondos para el Proyecto de Mejoramiento del Sistema de Agua Potable y Saneamiento Básico Integral de las localidades de Pucur y Santa Rosa de Huaqueray.
Asimismo, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) se hará cargo del mejoramiento y rehabilitación del camino vecinal Haquira-Ccocha.
El tercer acuerdo consiste en que el Ejecutivo emitirá una resolución suprema de relanzamiento del espacio de diálogo denominado Comisión Multisectorial de la provincia de Cotabambas y el distrito de Progreso con nueve puntos de la agenda. Los cotabambinos deberán elaborar un cronograma de trabajo y distribuir subgrupos.
El cuarto acuerdo es que el 8 de noviembre habrá una reunión para abordar la agenda del decreto supremo, en Challhuahuacho, con participación de los ministerios de Energía y Minas y Agricultura. Para esta ocasión, convocarán a la minera Las Bambas a participar.
El quinto acuerdo es que la solicitud de siete distritos para ser incluidos en la zona de influencia del proyecto minero será evaluada en el grupo de trabajo de temas ambientales. Esta comitiva sesionará el 9 de noviembre en la localidad de Pisaccasa, Mara. Para esto también convocarán a los representantes de Las Bambas.
Después del tema del canon, esta fue la problemática de la que más se quejaron los cotabambinos en la visita de la jefa de gabinete, debido a la contaminación ambiental a la que se exponen los distritos que están cerca del corredor minero.
“¿Qué será de nuestros nietos? ¿Qué impacto ambiental tendrán? En Maras tenemos el mayor impacto ambiental y los cotabambinos no tenemos oportunidades laborales”, lamentó un poblador presente en Pisaccasa.
Y, por último, el sexto acuerdo fue que los cotabambinos levanten el bloqueo.
No todos quedaron satisfechos, pues, más que mesas de diálogo, esperaban, como lo fue con el canon minero y los proyectos de infraestructura, decisiones directas del Ejecutivo ante sus otras demandas. Pero Vásquez no puede tomar medidas de manera unilateral. Para eso son las mesas de diálogo.
Este no es el único frente con el que debe lidiar la primera ministra. El corredor minero es una vía donde conviven la mayor cantidad de los conflictos sociales en las regiones de Cusco y Apurímac. La mesa de diálogo es solo un primer paso.
La primera ministra Mirtha Vásquez visita hoy Puno. Recordemos que ese fue su compromiso la semana pasada cuando se reunió con el secretario general de la Confederación Nacional de Productores de las Cuencas Cocaleras del Perú (Conpaccp), Julián Pérez Mallqui. Los cocaleros se oponen al plan de erradicación de la hoja de coca, pero levantaron el bloqueo de la vía Interoceánica a cambio de que la ministra resuelva el problema.
Asimismo, en el distrito de Livitaca, en la provincia cusqueña de Chumbivilcas, 15 comunidades continúan con su medida de fuerza desde hace tres días contra la minera Hudbay que opera en la zona.
Reacciones
Edison Luna, FUD de Livitaca: “Nosotros queremos una nueva propuesta económica para atender la demanda de nuestras comunidades, además que se incluya a otras en el área de influencia directa (de la minera Hudbay)”.
Gustavo Guerra García, MEF: “En diciembre les diremos el tamaño de ese canon. A los gobiernos regionales y municipales se les da el 50%, y el otro 50% se incorpora al presupuesto. Completaremos el canon para el 2022″.
Los acuerdos firmados
El punto más importante de este documento: el pago del canon para el próximo año. Mirtha Vásquez lo suscribió.
